Infernal Bidón 3L 
Si nos seguís en Instagram, tal vez sepas que un tip que recomendamos mucho en historias es la recolección de agua de lluvia para futuros riegos.
Pero, ¿por qué? La realidad es que esta agua cuenta con ciertas características que benefician a las plantas de nuestro jardín y macetas, además de favorecer al medioambiente y a nuestro bolsillo, claro está.
Te contamos de estas ventajas a continuación:
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No contiene cloro, a diferencia del agua potable.
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Tiene dióxido de carbono disuelto que la planta absorbe y que ayuda a su crecimiento.
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Limpia las hojas quitando el polvo, logrando que la planta se oxigene y respire mejor.
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Mejora la fertilidad del suelo.
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En el caso de que la planta esté expuesta a la lluvia de manera directa y que esta dure un tiempo; las gotas se filtran más profundamente, lo cual permite que los nutrientes que están en la superficie del sustrato lleguen hasta zonas más profundas de las raíces.
También te dejamos unos tips para cuando llegue el momento de utilizarla y regar las plantas:
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Primero introducir un palito en el sustrato para ver si está seco. Si es así, recién regar.
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Hacerlo por la mañana. Este horario es ideal ya que es cuando la planta más necesita el agua para poder activar su metabolismo.
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Hacerlo sobre el sustrato y alrededor de la planta.
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Observar siempre que el agua drene por el orificio de la maceta para verificar que no esté obstruido.
